Te he oído alardear de salvación
he escuchado tu alarido agónico
tu canto, hipócrita cristiano
tus plegarias siniestras espantan
cuántos pecadores pretendes redimir.
oh! insulso evangelio
en la vereda acantilado
sobre tu naufragio verborreico
de flores negras y sangre en la piel,
pastor carroñero de fe.
Te he visto lanzar más de mil palabras por minutos
y hacerte el ciego ante la agonía de un hermano,
te he visto con una mano dando la bendición
y con la otra recogiendo un diezmo por salvación.
He visto levantar tu almacén de mentiras
luego que has escupido sobre tu prójimo
justo en la mitad de la pobreza , ¡TÚ!, Misericordioso,
allí donde lo único que hay es fe.
Hipócrita cristiano, Prometeo criminal
enciende la llama de la hoguera del purgatorio
y crucifícate por la redención de la humanidad
como tu Jesús Cristo que la vida dio por ti
Y al que ahora vendes en estampillas y crucifijos de metal.
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