Por qué vienes tú mariposa cósmica
apareciéndote a medias;
entre glacial y roca ardiente,
piensas tú poderme asustar
pasando frágil como arena de estrellas
o furibunda cual cometa.
Qué pretendes provocar
¿catástrofes?,
convulsiones iracundas que me confundan
para cuando no te vea de rabia
amarrarme las manos,
romperme los labios con tus armas letales.
Quién te crees tú
llegas y pasas inesperada
como sol de media noche.
Quién te crees tú
saliendo y entrando a tu antojo.
Quién te crees tú
cuando inmisericorde vienes
dejando a la intemperie
mi cuerpo desharrapado
luego de provocar mi mirada involuntaria
ante tu menear exuberante, te paseas
felina en el borde del tejado,
cautelosa,
haciendo de todo el paisaje
un todo sumado a tus alhajas
adheridas a tu piel, y te vas,
despacio, te vas.
Crees tú qué me asustas,
acaso piensas eso
cuando me ves tiritando
apegando
tu voluptuosidad
en mi aliento de mar y vientos
cuando quieres navegar… ¡No!
Te digo ¡No!.
1 comentario:
Benja, muy lindo el poema, pero muy lúgubre.
¿Te pasa algo? ¿estas triste por algo?
El Poeta muere cuando su luz se apaga,
pero nunca muere solo, siempre se lleva con él el alma de quien lo mato,
porque su musa de inspiración le clavo esas estocadas.
¡no mueras poeta amigo! has de saber que la muerte anunciada es solamente del alma,
pero el alma tiene tantas vidas como desiluciones la muerte.
Y hoy aquella se va a desilucionar porque el alma volverá a renacer,
y no le dará el espacio suficiente para ahogarla,
por que esas pocas lágrimas fueron la misma razón de su despertar.
Cuidate, un beso
JESSICA PINO
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